Otras diversiones

Después de 1 mes completo de dieta me doy cuenta de algunas cosas.

1) Una de mis mayores diversiones era comer. O sea, incluso ahora aunque no lo haga, no puedo imaginarme unas vacaciones en la playa sin pensar en los restaurantes y los mariscos y las tardes con café y torta de chocolate o cualquier otra cosa dulce. Recién ahora estoy superando ir al cine y no comprarme chocolates, pop-corn, Coca-Cola, galletitas, etc, para comer durante la función. Ahora que lo pienso, hace 1 mes que no voy al cine. Se ve que todavía muy superado no está. Le estuve escapando a ir al cine.
Ir a casa de mis padres o a casa de amigos o encontrarme con alguien a tomar un café en algún bar y no pensar en qué voy a pedir/comer. Se me hace muy difícil y veo tan estéril mi realidad de tomarme un té y/o un agua con gas... Estoy empezando a pensar en otras diversiones.

Eso de cambiar los hábitos es muy difícil, pero se puede hacer. Me recuerda a cuando fumaba (dejé hace 2 años) que cuando no tenía un cigarrillo no sabía qué hacer con las manos.
El ser humano es un animal de costumbre, ¿no?

2) Soy "hija del rigor".
Si esta dieta no costara cara y fuera gratis, hace tiempo que la hubiera dejado. Bienvenido sea que haya bajado ya varios kilos y siga adelante, pero no puedo dejar de reflexionar sobre esto. En un post anterior dije "hace mucho que no hacía una dieta que diera resultado" pero, en realidad, las dietas no eran el problema, el problema era yo. Estoy tratando de cambiar mi forma de pensar/actuar con respecto a la comida porque si no cuando ya no esté a dieta ¡voy a terminar comiendo por todos los meses que no lo estuve haciendo! Y esa no es la idea. Recién estoy en la fase 1, pero a medida que siga avanzando voy a llegar a la etapa de "reeducación alimentaria". Eso está bien pensado porque si no la gente volvería a caer fácilmente en sus hábitos nocivos.
Hacer las cosas sin pensar es fácil. La gracia es poder experimentar un cambio profundo. Eso espero.